Tras el paso de un par de semanas de Septiembre y la vuelta a la normalidad, cuando los niños están en los colegios y los clientes tienen más tiempo para la organización, podemos hacer balance de lo que ha sido el verano en la Notaria.
La Notaria de Don Eduardo C. Ballester Vázquez en Sevilla no cierra por vacaciones, por lo que los empleados nos organizamos en turnos para atender a todo el que quiera, y con organización y buena letra hemos atendido a todos los clientes que nos han visitado en esta temporada pasada.
Ya por Julio empieza la “época estival laboral” donde los clientes empiezan a preguntarte donde vas y algunos empiezan a desaparecer por temporadas, pero lo que afecta a la Notaria son las prisas y las ganas de correr, SE JUNTA EL HAMBRE CON LAS GANAS DE COMER, y porque digo esto, pues porque empieza un BOOM de prisas, todos los clientes quieren cerrar sus cosas, dejarlo todo firmado y finiquitado para verano, todo con prisas y sin días con los que contar: es que me voy el lunes de vacaciones, lo tengo que dejar todo listo antes del viernes, etc, etc… pero los clientes no son los únicos que se ausentan, nosotros en la Notaria también tenemos vacaciones y nuestro personal disminuye, así como los compañeros de Registros o de otras Notarias, por lo que los tramites se demoran más de lo deseado, en muchas ocasiones reclamamos y reclamamos con tal de solucionar las exigencias de nuestros clientes lo antes posible, pero no siempre está en nuestras manos que el trámite termine antes de su partida.
Es complicado hacer entender a los clientes, que pese a que la Notaria no cierre y que estemos a su disposición con la misma entrega que el resto del año, no depende de nosotros los parones de agosto, y que en julio y diciembre hay un BOOM de escrituras y prisas como en ninguna época el resto del año; así que cuando le dices «es que el compañero está de vacaciones», es exactamente igual que cuando nos lo dicen a nosotros, y mucho, registros, abogados, incluso clientes que te dejan copias y facturas para la vuelta, no pasa nada, agosto es así, pero hay que conocerlo y entenderlo, es época de relax y parece que nos gusta estresarnos antes de partir para relajarnos aún más.
Aun así hay que mantener la calma, dar el mejor servicio y tener el doble de carisma y dedicación que siempre, porque también es tiempo de descanso para todos (sea más o menos), y como todo, el agosto… también pasa.
Isabel Ramos